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EL PARQUE “REVOLUCIÓN” Y EL “HEMICICLO DE LOS HÉROES REVOLUCIONARIOS”





Autor: Sealtiel Enciso Pérez

La ciudad de La Paz encierra una gran cantidad de espacios recreativos que hacen de las tardes y noches tan calurosas unos oasis de diversión y esparcimiento para sus habitantes. También no hay que dejar de lado a las parejitas que tarde a tarde encuentran en sus maceteras y bancas un lugar para recrearse en los brazos de Eros, Dios griego del Amor. 

Uno de estos emblemáticos lugares es el céntrico Parque “Revolución” el cual se ubica en la manzana conformada por las calles Jaime Bravo, A. Rosales, Félix Ortega y Marcelo Rubio R. en la Colonia Centro. El mencionado sitio fue construido durante la administración del Gral. Agustín Olachea Avilés y se constituyó en el 5to. Parque de la ciudad, antecediéndole los ya existentes: Jardín Máximo Velasco, Cuauhtémoc, Jesús García y Porfirio Díaz. Este bello conjunto recreativo se empezó a construir a principios del año de 1951 y fue inaugurado el 20 de noviembre del mismo año contando con la presencia del Lic. Miguel Alemán Velasco así como el Gral. Agustín Olachea A. y una gran cantidad de representantes de las fuerzas armadas y de la sociedad civil en el Territorio de Baja California Sur. En esta fecha se conmemoraba el XLI Aniversario del inicio del movimiento armado llamado “Revolución Mexicana”.

El sitio cuenta con una amplia explanada rodeada en todos sus lados por una arboleda compuesta por eucaliptos, palmas, benjaminas, laureles de la india y una gran cantidad de buganvilias las cuales al florecer dan un encanto colorido y peculiar a este espacio. En la esquina de las calles Rosales y Marcelo Rubio se construyó una pequeña edificación como oficinas del grupo Scout “Albatroz”; en el extremo contrario se edificó hace más o menos unos 15 años un pequeño kiosco llamado “La Plaza de los Músicos. Santa Cecilia” en donde se pueden contratar a grupos de Mariachis. En medio de estas dos construcciones se colocó un área con juegos infantiles en donde los chiquitines pueden disfrutar de una tarde y noche muy amena correteando y disfrutando de los juegos.



Sin embargo la estructura principal, que sobresale de forma por demás majestuosa en este sitio, es el famoso “Hemiciclo” dedicado a los Héroes Revolucionarios; todos ellos compañeros de armas y conocidos del Gral. Agustín Olachea A. La mencionada estructura está sostenida por columnas así como muros “de carga” a los costados. Frente a ésta se halla un templete en el cual se han desarrollado innumerables festivales artísticos y actos políticos incluso de candidatos a la Presidencia de la República.

El mencionado Hemiciclo recibe el nombre debido a que en la parte superior del techo de esta edificación se encuentra distribuidos a intervalos regulares los bustos de 5 generales revolucionarios: Agustín Olachea Avilés, Alvaro Obregón, Venustiano Carranza, Plutarco Elías Calles y Lázaro Cárdenas. Los bustos fueron diseñados, en su mayoría, por el escultor Ernesto E. Tamariz. Es curioso al analizar la vida y la muerte de estos personajes que paradójicamente se encuentran juntos en la muerte, cuando en la vida se asesinaron entre ellos. Sólo nuestro caudillo sudcaliforniano se escapó a la vorágine acontecida durante la época post revolucionaria.

En el año de 1987, siendo el último año de la gubernatura del Lic. Alberto A. Alvarado A. se realizó una remodelación de este Parque y se le agregó una columna, en la parte adyacente a la calle J. Bravo, sobre la que descansa el busto del Sr. Francisco I. Madero, como un homenaje al hombre que inició esta gesta revolucionaria con el pronunciamiento del famoso Plan de San Luis el 8 de octubre de 1910. El encargado de hacer esta obra fue el escultor Guillermo Vázquez.



Con el transcurso del tiempo este parque ha tenido varias modificaciones entre las que tristemente sobresale la pérdida de unas bellas lámparas de Caballitos de Mar que estaban sobre los postes que se colocaron alrededor del sitio y que se desconoce el paradero de ellas.

Es nuestro más ferviente deseo que este sitio continúe existiendo por muchos años más, pero con un cuidado digno y permanente a fin de mantenerlo en óptimo funcionamiento para el solaz y descanso de los paceños.


Bibliografía:

La Paz, ciudad y puerto mexicano. Origen, proceso histórico y símbolo emblemático – Profr. Gilberto Ibarra Rivera.

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