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El Sacerdote Jesuita Juan Jacobo Baegert y el surgimiento de la leyenda negra de la California ancestral





Autor: Sealtiel Enciso Pérez

Por demás interesante resulta escudriñar en las páginas que nos legaron los primeros colonos que llegaron a la California primigenia. Los escritos realizados por los Sacerdotes jesuitas dan cuenta del estado en que se encontraban no sólo los habitantes milenarios de la tierra de Calafia, sino también sus costumbres, alimentación, relaciones familiares, cosmogonía, festejos, flora y fauna de estas tierras.

En este caso analizaremos el legado que dejó para esta tierra un jesuita que vivió por 17 años encerrado en uno de los rincones más agrestes y hostiles de esta tierra Californiana y que supo guiar al grupo de indígenas guaycuras con los que interactuó aprendiendo su lengua y costumbre. Me refiero al S.J. Juan Jacobo Baegert, el cual estuvo encargado de la Misión de San Luis Gonzaga de Chiriyaqui, en lo que hoy es el municipio de Comondú.

El Jesuita Baegert procedía de una familia con una larga tradición de integrantes de la misma que habían abrazado la vida religiosa católica. Con tan sólo 32 años se ordenó sacerdote en su natal Schlettstadt, en lo que hoy es Alemania, y de inmediato fue enviado a la Nueva España. Al llegar a la capital de la Colonia, sólo se le permitió descansar unos pocos días y de inmediato se le ordenó presentarse bajo las órdenes de sus superiores en una tierra de nombre California, para continuar la labor evangelizadora y colonizadora que venían realizando los ignacianos desde hacía 52 años en ese sitio.


A principios del año de 1750 llega a las tierras Californianas, desembarcando en el puerto de Loreto, donde de inmediato es recibido por sus compañeros religiosos y  se le asignan tareas del culto religioso así como otras administrativas, iniciando también un curso intensivo de aprendizaje de la lengua del pueblo cochimí. A mediados de ese año es enviado a la que a la postre se convertiría en la Misión de San Luis Gonzaga de Chiriyaqui, una de las pocas que se ha mantenido en pie y en su estado original desde su fundación. 

El sitio donde se fundó la misión era muy concurrido por rancherías y bandas de indios los cuales mantenían asentamientos más o menos estables debido a su cercanía con el Mar Bermejo de donde obtenía muchos de sus alimentos así como por la gran cantidad de plantas y cactáceas de las cuales se alimentaban durante el año, así como una gran variedad de animales que complementaban su dieta.

Durante estos 17 años que vivió el sacerdote Baegert en esta región logró hacer muchas anotaciones en las que registró de manera objetiva y totalmente fría y descarnada sus vivencias y lo que pudo observar y percibir de aquella gente y aquella tierra. Todos estos conocimientos le servirían a la postre para escribir un libro el cual tituló “Noticias de la península americana de California" el cual salió a la luz en el año de 1771.


En este libro se hace una descripción detallada de las cactáceas que abundaban en aquella región; incluso en uno de los pasajes del libro narra que por “puro ocio” se puso a contar la cantidad de espinas que tenía una rama de un cactus (probablemente una pitahaya) y logró contar “no menos de 1680”. Hombre acucioso y acostumbrado a realizar largas disertaciones filosóficas sobre lo que observaba, también realizó una larga investigación sobre animales como aves, carneros, zorros, leones de montaña, víboras, langostas, hormigas y todo lo que se cruzaba a su paso. Realizó experimentos con una paloma, un perro y un gallo para determinar la toxicidad del veneno de las víboras de cascabel, las cuales diariamente encontraba dentro y fuera de la habitación donde pernoctaba. 


En sus escritos describió las costumbres que caracterizaban a los indígenas cochimíes con los que convivía. Los tachaba como personas de muy escasa inteligencia, flojos y que siempre rehuían el trabajo. Siempre estaban hambrientos y no desperdiciaban la oportunidad para robarse el ganado o comer cualquier pequeña espiga de trigo sin el menor empacho o remordimiento. Describe en su libro que los indígenas californios no conocían conceptos abstractos como amor, inmortalidad, renacimiento, etc. Por lo que le fue sumamente difícil el poder evangelizarlos y que se apropiaran de la doctrina católica. 

De suma importancia son sus escritos en los que describe las costumbres de higiene de los indígenas, en donde describe que acostumbraban darse un pequeño baño con sus propios orines, por lo que después de este “aseo” quedaban más sucios y con un penetrante olor que los acompañaba todo el día. También describe la costumbre de los indígenas de extraer las semillas de pitahaya de sus excrementos, ya secos, y tostarlas y molerlas para hacer un pinole que guardaban para alimentarse posteriormente con él. El historiador Pablo L. Martínez, llamó a sus escritos “La leyenda Negra” de la antigua california y cuestionaba la veracidad de estas narraciones.


Muy interesantes también resultan sus anotaciones en cuanto a la geografía y orografía de la península, la cual pudo recorrer en su mayor parte y, donde se cuestionaba de la procedencia de las Conchas que encontraba en lugares remotos de la serranía y que no podía explicarse cómo llegaron a ese sitio. También logró constatar que nuestra California Original no era una Isla como originalmente se pensaba sino un península unida al macizo continental en su parte norte.


En fin, podríamos seguir escribiendo sobre el impacto que ha tenido la obra de este Alsaciano en el conocimiento de las costumbres y de cómo conoció la California en los 17 años que vivió en ella, pero cerraremos este capítulo diciendo que ninguna persona que se precie de ser un mediano conocedor de esta tierra de la California del Sur podrá afirmarlo, si no ha leído y meditado sobre el maravilloso libro que nos legó el Jesuita Juan Jacobo Baegert.

BIBLIOGRAFÍA:

LAS NOTICIAS DE LA PENINSULA AMERICANA DE CALIFORNIA Por el Rev. Padre JUAN JACOBO BAEGERT Con traducción por Pavlov Kirchhoff. Editora Elizabeth Acosta Mendía. México, 2013.

https://es.wikipedia.org/wiki/Juan_Jacobo_Baegert


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